Discurso Reflexivo en Natalicio Don Pedro Albizu Campos
Plaza Monumento Don Pedro Albizu Campos, Salinas
10 de septiembre de 2022
Me siento muy honrada y agradecida con el Comité Organizador por haber pensado en mí para compartir con ustedes la reflexión de esta actividad. Es importante realizarla tanto para conmemorar y perpetuar a quien con profunda gratitud, respeto y orgullo llamo mi vecino: Don Pedro Albizu Campos.
Mientras me preparaba para este momento traté de identificar algo de eso que represento y me representa, y que movía a Don Pedro: la fe. Y a la misma vez buscaba algo de eso que me mueve y movía a Don Pedro: el amor a nuestra nación, a nuestra ansiada libertad y nuestra gente.
Entonces vino a mi mente eso que se lee en el Salmo 88, 11: “La justicia y la paz se besan”.
Además, recordé una cita de Don Pedro que, desde que la leí, reconozco que es casi un principio de valores cristianos y humanos. Don Pedro decía: “La ley del amor y la ley del sacrificio no admiten separación”.
Esas dos citas que les acabo de compartir deben ser lo que mueva al ser humano. No puede haber justicia, si no hay paz. ¿Cuándo hemos visto que la paz es el fruto de una injusticia? ¿Cuándo, quien ama con amor genuino, no se sacrifica por lo que ama?
Ahora tal vez más que en cualquier otro tiempo histórico, nuestro país, nuestro pueblo de Salinas y nosotros, su gente, necesitamos que la justicia comunitaria, social, familiar y política sean una realidad para poder experimentar la paz que anhelamos y merecemos. Esto no será posible si no hay hombres y mujeres, seres que sean capaces de amar hasta el sacrificio como lo han hecho tantos y tantas en nuestra historia.
Sirva esta actividad para agradecer, y yo agradezco a Dios, por la vida de amor, entrega y sacrificio de Don Pedro Albizu Campos. Además, trabajar para lograr que la justicia, paz y amor prevalezcan en nuestro tiempo y en futuras generaciones.
Permítanme terminar esta reflexión de la mejor forma que se, y acompáñenme a entonar este himno de amor patrio.
(Verde Luz)
Verde luz de monte y mar
Isla virgen del coral
Si me ausento de tus playas rumorosas
Si me alejo de tus palmas silenciosas
Quiero volver, quiero volver
A sentir la tibia arena
A dormir en tus riberas
Isla mía, flor cautiva
Para ti quiero tener
Libre tu suelo
Sola tu estrella
Isla doncella, quiero tener
Verde luz de monte y mar
Por Litzy Alvarado Antonetty
Presidenta
Partido Independentista Puertorriqueño, Salinas
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